Quizás América del Sur sea una de las zonas geográficas que debe enorgullecerse más por el favor que le dio la naturaleza, sobretodo por su expresión de vida salvaje. Esto la convierte en un destino indudable para el ecoturismo, y para quienes deseen conocer la biodiversidad del planeta. En ese sentido la Selva Amazónica ocupa más de la mitad de la superficie de Sudamérica constituyéndose así como un gran pulmón para la humanidad. Es importante mencionar que esta franja la poseen casi íntegramente los países de Brasil y Perú, ambos compartiendo el cauce del Amazonas, el río más caudaloso del mundo.
En este hábitat se desplaza la Anaconda, inmensa serpiente que con cuyo cuerpo, sólo apretujando puede asfixiar a un caimán, a un ciervo o hasta un felino, para luego engullirlo prácticamente entero. El Jaguar por su parte posee el status de ser el felino más grande, cuyo peso está cerca de las 400 libras, y que con sus mandíbulas pueden perforar rápidamente el cráneo de sus víctimas. También en esta zona discurre el Tapir, animal herbívoro de 6 pies de largo y 800 libras de peso. Caso inusitado es el largo periodo de gestación que llega hasta los 134 meses. Vale la pena mencionar que es un animal en tierra, y en el agua es buen nadador.
E.T.’s Brother (Galapagos) por Ole Begemann
Por otro lado, demos un paseo por la vida salvaje del Gran Pantanal. Esta zona es en realidad una media luna que se posa al suroeste del Brasil y que colinda con Bolivia y Paraguay. Por su extensión de 200,000 kilómetros cuadrados es considerado como el humedal más grande del mundo. ¿Sabías que sus aguas provienen de la filtración de varios ríos? Sí, estos ríos provocan un sedimento que en temporada húmeda suben hasta 3 metros de su nivel. Sigamos conociendo la fauna y flora del lugar… Allí se han contabilizado más de 3,500 vegetales, 650 especies de aves tropicales, 95 clases de mamíferos donde el Yaguareté, Carpincho y Tapir son los animales representativos. A esto se agrega los millares de clases de insectos y peces.
Galapagos Hawk por David Thyberg
Ahora vayamos a un lugar excepcional en el Océano Pacífico: Galápagos, un grupo de islas volcánicas a 1,050 kilómetros de las costas de Ecuador. Su fama se debe a sus animales que sólo se hallan ahí, y porque además sirvió de base a Charles Darwin para formular su Teoría del Origen de las Especies. Galápagos fue declarado Parque Nacional en 1959 y declarado Patrimonio de la Humanidad en 1978 por
la UNESCO. Entre su fauna exclusiva podemos mencionar a la Tortuga Gigante o galápago, la Iguana Terrestre de color amarillo, la Iguana Marina, la Gaviota de Lava, 13 especies de Pinzones, quienes extraen la sangre de las aves enfermas; Pingüinos Galápagos y la Garza Enana.
Fuente: viajesudamerica.com