Es una de las nuevas tendencias, la modernizada “búsqueda del tesoro” que se solía jugar en otro momento, ahora potenciada por la avanzada tecnología del GPS y las aplicaciones para el celular. Se trata de una muy buena forma de juego para los más chicos, ya que (bajo la supervisión de un adulto), pueden salir a hacer ejercicio mientras se divierten buscando un “tesoro escondido”.
Las reglas nos son muy difíciles, el líder del juego toma los objetos (generalmente algo útil de outdoor como una linterna o una brújula) y los coloca en diferentes zonas algo escondidos. Los demás, haciendo uso de alguna aplicación de geocaching van en búsqueda de esos elementos, y el que encuentra más es el ganador.
Por supuesto, como toda actividad outdoor merece algunas consideraciones que evaluaremos:
Mantenerse hidratado: uno de los grandes peligros de estar muy entretenidos al aire libre es estar sobre expuestos al sol y no considerar la deshidratación. Es un “enemigo invisible”, ya que no suele tener síntomas muy marcados más que sequedad en la boca y mareos. En lo posible, y dentro de la demanda del cuerpo, hay que tomar unos dos litros de agua por persona por día. Esto implica que el organizador del juego tendrá que contar con los litros suficientes para todos antes de empezar. No hay que confiarse en las fuentes de agua autóctonas, ya que al menos que usemos un filtro de agua antibacterial, corremos riesgo de contraer alguna bacteria o parásito muy peligroso.
Llevar algunas lapiceras y lápices: es una buena forma de escribir el nombre del que encontró el “cache” o caja. De esta forma al finalizar el juego tendremos un registro del ganador, podremos dejar pistas en algunas zonas cercanas y hasta marcar el lugar en un mapa físico para mejorar las habilidades de cartografía de los más pequeños.
Vestir la ropa adecuada: es una actividad en la que se camina mucho, por lo que es indispensable vestir calzado adecuado de previo uso, siempre usar medias y tratar de tomar descansos después de caminatas prolongadas. En época estival, el sol puede causarnos insolación o problemas de la piel, por lo que debemos usar un gorro y protector solar en las partes expuestas. Los mosquitos suelen ser un gran problema, usar repelente es un buen consejo.
Llevar un mapa: la aplicación será muy útil, pero debemos tener un mapa de soporte en el caso que las comunicaciones fallen. Pero además será una buena forma de enseñarles referencias visuales y lectura de mapas a los novatos.
No pasar hambre: tanto el organizador como los participantes deben llevar alguna forma de snack o tentempié para consumir a mitad de la jornada. No parece, pero las caminatas y búsquedas son muy demandantes. Pasas de uvas, frutas secas y barras de cereales son muy buenas opciones.
Prepararse el día anterior: además de juntar todos los pertrechos que vamos a necesitar, es indispensable comer bien la noche anterior. Podemos preparar una comilona, salir a comer por ahí o pedir comida online con mucha facilidad.